15 dic 2012 Soy un Dios que todo lo perdona, dispuesto a concederles la libertad de los pecados, que los atrapan
Sábado 15 de Diciembre de 2012 a las 21:45 hrs.
Mi muy querida bienamada hija, deseo alcanzar a aquellos de ustedes que están en este momento angustiados en sus vidas.
Hago una llamada a aquellos de ustedes, que se encuentran en pecado grave y que están desesperados por encontrar el consuelo algún día, debido al dolor en que se encuentran. Puede que sean culpables de pecado grave/mortal, incluyendo el asesinato, el aborto, la violencia, depravación sexual o quizá hayan incursionado en el ocultismo, pero ¿No saben que todo lo que deben hacer es volverse a Mí y pedirme que los auxilie?
Soy un Dios que todo lo perdona, dispuesto a concederles la libertad de los pecados, que los atrapan. Estos pecados pueden ser desterrados de su vida. Todo lo que se necesita es valentía. Recuerden que no hay ni un solo pecado, excepto el pecado de blasfemia en contra del Espíritu Santo, que Yo no les perdonaré.
Que los pecadores no puedan permanecer en estado de gracia por mucho tiempo, no es lo que les impide buscar Mi Perdón. Lo que los mantiene alejados de Mí es el pensamiento(concepto/idea) de que Yo nunca podría perdonarlos.
Mi Misericordia es tan grande que será obsequiada a los que la pidan.
Llamo a todos ustedes que están inseguros de Mi Existencia. Les pido que confíen en Mí. Por confiar en Mí, comunicándose Conmigo y pidiéndome que los perdone, es que recibirán la respuesta que ustedes anhelan.
Yo responderé y ustedes lo sentirán en su corazón, cuando recen la Cruzada de Oración para pedir la Gracia de Mi Misericordia para los miserables/desdichados pecadores.
Cruzada de Oración (89) Por los miserables pecadores
“Querido Jesús, ayúdame a mí, un pobre miserable pecador, a ir a Ti con remordimiento en mi alma. Purifícame de los pecados, que han destruido mi vida. Dame el don de una nueva vida, libre de las cadenas del pecado, y la libertad, que mis pecados me niegan.
Renuévame en la Luz de Tu Misericordia. Acógeme en Tu corazón. Déjame sentir Tu Amor para que pueda volver a acercarme a Ti y que mi amor por Ti sea encendido. Ten misericordia de mí, Jesús, y manténme libre de pecado. Hazme digno de entrar en Tu Nuevo Paraíso. Amén.”
Recuerden, no es porque las almas sean dignas de entrar a Mi Reino, que ellas reciben la reconciliación. Sino que se debe a que Mi Misericordia es tan grande que Yo puedo salvar a cada pecador, si tan solo ellos buscaran la valentía que necesitan para pedirme ayuda.
Los amo a todos ustedes con una pasión permanente. Nunca rechacen Mi Amor o Misericordia, porque sin ellos, se hundirán aún más en el pecado y permanecerán perdidos para Mí.
Cuando recen esta oración, Yo responderé de tal manera que encontrarán muy difícil alejarse de Mí otra vez.
Su amado Jesús