27 nov 2012 Mis sacerdotes, no debéis ofenderme declarando que soy un mentiroso

02.12.2012 00:49

Mis sacerdotes, no debéis ofenderme declarando que soy un mentiroso

Martes 27 de Noviembre, 2012  a las 20:08 hrs.

 

Mi muy querida hija, debo explicar que muchos de vosotros que trabajáis  duro para promover y difundir Mi Santa Palabra, seréis atacados más que nunca por los  autoproclamados expertos, que quieren desechar estos mensajes como si no tuvieran ninguna consecuencia.

Otros, que os atacarán, os dirán que no tenéis derecho a proclamar Mi Palabra ni a  declararla ser la Verdad.

Finalmente, os veréis amenazados por ciertos servidores sagrados que están dentro de Mi Iglesia y os dirán que suspendáis todo lo que estéis haciendo, ya que se sienten ofendidos por vuestro trabajo.

Dirán que estos mensajes no son de Dios.

Ellos sospechan que los mensajes provienen de una fuerza maligna. Dirán que  estos mensajes están en oposición a las enseñanzas de Mi Iglesia. Para ellos digo esto:

¿Qué parte de los mensajes os provoca tal angustia? ¿Por qué no decís  la Verdad cuando criticáis Mi Palabra?

¿Por qué presumís(vanagloriarse) de vuestro conocimiento de las cosas espirituales, el que vosotros decís supera al Mío?

¿Habláis en favor de Mi Cuerpo en la tierra, de Mi Iglesia? Si es así, entonces, a través de Mi Santo Vicario, no he autorizado esto.

¿Es vuestra campaña(contienda) rechazar estos mensajes, tan intensamente, basados en  vuestros propios puntos de vista y opiniones personales?

Vosotros buscáis fallas, para luego amenazar a vuestro rebaño, de que leyendo Mi Palabra, estarán equivocados.

Vosotros decís que Mi Santa Palabra debe ser rechazada, para luego decir a Mis seguidores que es su obligación así hacerlo.

¿Por qué tenéis miedo al Rey, al que habéis prometido vuestra vida?

Yo no soy para ser temido, Mi Palabra, a pesar de todo os sienta incómoda.

Hay muchos profetas autoproclamados en el mundo que no son auténticos y necesitan las oraciones de muchos. A los que son auténticos, sin embargo, son a los  que siempre vosotros más os dirigiréis. Se trata de Mis profetas genuinos que incurren en la ira de los sacerdotes, que siguen inseguros del  objetivo de esta Mi Santa Misión.

Tened cuidado respecto a quién desafiáis, a quién rociáis veneno, falsedades e inventáis calumnias, porque Yo no os he dado, ni Mi Iglesia la autoridad  para hacer esto. Mis sacerdotes, no debéis ofenderme, declarando que soy un mentiroso.

Cuando el día de la Verdad os sea revelado,  sentiréis mucha vergüenza.

Debéis bajar vuestras armas y eliminar todo el odio y la ira que os atormenta en estos momentos. Después mirad lo que os ha sucedido. Satanás os ha engañado de una manera para que vuestros ataques verbales y escritos sobre esta Obra vaya mucho más allá de lo que es esperado de vosotros como sacerdotes.

¿Por qué ha ocurrido esto? Es para retrasar esta Misión y llevar gente lejos de Mis Oraciones que han sido enviadas desde el Cielo para salvar almas. Lo que estáis  haciendo es tratar de detenerme, a vuestro Jesús, en Mi Plan para la salvación de la humanidad.

Esta es una ofensa muy grave contra Dios.

He aquí una Oración de la Cruzada para ayudaros a responder a Mi Llamado y para liberaros del tormento de la duda.

Cruzada de Oración (86)  libérame del tormento de la duda

Me presento ante Tí confundido, inseguro y frustrado, querido Jesús, porque estoy preocupado acerca de la Verdad que Tú proclamas en Tus Mensajes.

Perdóname si te he ofendido.

Perdóname si no puedo escucharte.

Abre mis ojos para que se me pueda mostrar qué es lo que Tú necesitas que yo comprenda.

Te suplico, que me concedas el Poder del Espíritu Santo para que me muestre la Verdad.

Te amo, querido Jesús, y te ruego que me liberes del tormento de la duda.

Ayúdame a responder a Tu Llamado.

Perdóname si te he ofendido y llévame más cerca de Tu corazón.

Guíame a Tu Nuevo Reino y concédeme la gracia, para que a través de mis propias oraciones y sufrimientos, pueda ayudarte a salvar almas tan preciosas para Tu Sagrado Corazón.

Vuestro Jesús