22 nov 2012 Dios Padre: Les ofrezco el futuro más perfecto

27.11.2012 12:35

Jueves 22 de Noviembre de 2012 a las 19:00 hrs.

Mi queridísima hija, la Luz de Mi Amor desciende sobre la tierra hoy en día, con la esperanza de que los corazones de Mis hijos puedan ser movidos.

Para los que no me conocen, y para los muchos que tienen miedo de acercarse a Mí, deben saber que Yo deseo llevarlos al Reino de Mi Hijo.

Yo Soy el Dios del Amor y el Dios que les ha legado el Don de Salvación.

No deben descartar este Regalo que fué dado a la humanidad para que se puedan unir de nuevo a disfrutar del Paraíso, que Yo he creado para ellos en primer lugar.

Este es el tiempo para el día del Señor, y ustedes, hijos Míos, se están preparando para este gran día.

El tiempo de Mi Intervención Divina, para que puedan ser salvados para entrar por las puertas del Reino de Mi Hijo, pronto se llevará a cabo.

Cuando las profecías anunciadas en Mi Libro Sagrado, comiencen a suceder, finalmente ustedes aceptarán la Verdad.

La Verdad que he prometido a la humanidad, para estos tiempos, se les está dando a ustedes ahora.

¿Por qué, se preguntarán, necesito que a Mis hijos se les entregue la Verdad de Mi Santa Palabra otra vez?

Esto se debe a que actualmente muy pocos en el mundo creen en Mi Existencia. Ya no prestan atención a Mis Diez Mandamientos.

La arrogancia ha reemplazado a la humildad entre Mis hijos, incluyendo a muchos siervos consagrados que fueron designados para impartir la Verdad. Muchos no hacen caso a la Verdad de Mi Palabra y, más aún, nunca se les ha enseñado el significado de su propia existencia en la tierra.

Tantas almas pueden ahora ser redimidas por Mi amor, y por ello les he dado instrucciones, por medio de Mi Hijo amado, en cuanto a lo que se espera de ustedes.

Abracen la Verdad. Recuérdenles a los que están cerca de ustedes de Mi gran amor por Mis hijos.

Como cualquier otro buen Padre, advertiré a Mis hijos de los peligros que enfrentarán. Yo nunca dejaré que caminen ciegamente hacia la red del engaño, que ha caído sobre la humanidad como una red de pescador sobre un banco de peces desprevenidos.

No voy a permitir a los que tratan de evitar que Mi Santa Palabra sea escuchada, que hagan triquiñuela las Palabras de Mi Hijo. Ni tampoco dejaría de advertir, en Mi deber, a Mis hijos de los castigos que enfrentarán si continúan ofendiéndome en su trato con los demás.

Yo soy su Padre. Soy responsanble de agrupar a Mis hijos para juntarse otra vez y utilizaré todo lo necesario para salvar a Mis hijos del mal.

Cada táctica, cada truco será usado por Satanás y sus fieles seguidores, pues los quieren detener/parar a ustedes para que no escuchen la Verdad.

Esto lo prometo solemnemente: Ustedes serán llevados rápidamente entre Mis brazos y hacia la protección de la Gran Misericordia de Mi Hijo.

La batalla por las almas ha comenzado, aunque esto no parezca evidente para muchos de ustedes.

Para que puedan disfrutar Mi Nuevo Paraíso en la tierra, deben aceptar Mi Mano mientras ella se extienda a ustedes. No tengan miedo porque Yo cubriré a todos los que me honran a Mí, su Padre Eterno y a Mi Precioso Hijo, con Mi Sello.

Presten atención a Mi Llamada. Sean fuertes. Cierren sus oídos a los susurros de la bestia que utiliza a esas almas, que están manchadas con el pecado del orgullo, para separarlos de Mi.

Les ofrezco el futuro más perfecto. No deben rechazar este Paraíso, porque esta es su herencia. ¿Cuántos de ustedes rechazarían una herencia con grandes riquezas en el mundo? Muy pocos. No cometan el error de darle la espalda a este Don.

Cualquiera que trate de detenerlos, necesita de sus oraciones, porque Yo amo a todos Mis hijos.

Yo, su Padre, me aseguraré que Mi gran plan, para anunciar la Segunda Venida de Mi Hijo, no se retrase.

Vengan a Mí, a través de Mi Hijo, y no les importará ninguna otra cosa más. Los amo. Lloro por muchos de ustedes, demasiado obstinados como para ver que se trata, en efecto, de la Llamada del Cielo, prometida para prepararlos para la Nueva Era de Paz.

 

Su Padre Amado, 

Dios Altísimo