18 may 2012 Dios Padre: No teman Mi mano, sino la mano de aquellos que son sus enemigos

13.10.2015 11:44

Viernes 18 de mayo de 2012 a las 15:20 hrs.

Hablo contigo hoy, Mi queridísima hija, para traer consuelo a aquellos que temen el futuro. El futuro, queridos hijos, yace en Mis Santa Manos.

Ha llegado el tiempo para que el Nuevo Reino, el Reino sobre el cual Mi amado Hijo reine, se cumpla.

Esta es la etapa final, cuando la Tierra está siendo preparada para dar a luz a las multitudes que aman a Mi Hijo, y a su tiempo, me amen a Mí.

Mucho tiene que suceder para que Mi Divina Voluntad se haga y la oración, la paciencia y el valor/valentía son necesarios.

No teman Mi Mano sino la mano de aquellos que son sus enemigos.

Mucha maldad está desenfrenada en el mundo y el momento ha llegado para que Yo castigue a aquellas naciones que atormentan a Mis hijos en la Tierra.

Mientras que la batalla comienza, las Casas que me honran a Mí, Dios Padre, serán renovadas.

Pronto, ellos se darán cuenta de cómo rechazaron al Único Mesías Verdadero que envié a la Tierra, en Mi Hijo Jesucristo, para dar al mundo la salvación.

Entonces, aquellos que creen en Mi Hijo y en Mí, El Dios Altísimo, se levantarán al unísono para preparar el terreno para que la Segunda Venida de Mi Hijo, pueda llevarse a cabo.

Solo cuando la Purificación esté completa regresará Mi Hijo.

La Purificación de la que Yo hablo es cuando los buenos serán separados de aquellos que son malos. Aquellos que viven sus vidas llenas con las mentiras plantadas en sus almas por Satanás todavía tienen tiempo de arrepentirse.

Todo intento será hecho por Mí para rescatarlos a ellos de la bestia, ya que Yo no renuncio a Mis hijos tan fácilmente.

Yo, a través de varias Intervenciones Divinas, decretadas por Mí, trataré de llevarlos a Mis Misericordiosos Brazos para salvarlos.

La confianza y el creer en Mí son el sendero a la Vida Eterna.

Solo a través de Mi Hijo, el Salvador del Mundo, ustedes pueden venir a Mí, el Padre del Universo, porque para venir a Mí, ustedes deben ser salvados del pecado.

Para ser salvados del Pecado, se deben redimir(expiar sus pecados) ante los Ojos de Mi Hijo.

Así como Yo envié a Mi Hijo la primera vez para concederles la salvación a ustedes, así también, Yo lo envío una vez más, para salvarlos una última vez, antes de que el Nuevo Cielo y la Nueva Tierra se fundan para convertirse en uno solo.

Aquellos que rehúsen aceptar la Gran Misericordia de Mi Hijo, después de esta última Cruzada para traer a todos Mis Hijos al Paraíso, su legítima herencia, se perderán para siempre.

No puede haber retorno después de esto. Nunca olviden Quién Soy Yo.

Yo Soy Dios Padre y Yo los creé a ustedes. Los amo.

Yo deseo traerlos a todos a casa, pero cómo Mis lágrimas fluyen tanto!

Esto es porque habrá tantísimos que Yo no podré rescatar a menos que ellos recurran a Mí y me pidan que los ayude.

Esta Llamada de los Cielos ha sido predicha.

Solo el Cordero de Dios, Mi Hijo, tiene la autoridad para revelarles los acontecimientos que yacen por delante.

Solo Él puede abrir los Sellos.

Él hace esto ahora con la ayuda del Séptimo Ángel, el Séptimo Mensajero.

Abran sus ojos y acepten que, al fin, el Libro de la Verdad profetizado está ahora siendo abierto, capítulo por capítulo ante sus ojos.

Acéptenlo como un Don, porque les traerá Vida Eterna.

Su amado Padre del Cielo, Dios Altísimo.