17 nov 2012 Tengo un mensaje, que debo impartir al pueblo Estadounidense

22.11.2012 19:23

Sábado 17 de Noviembre de 2012 a las 19:00 hrs.

Mi muy querida bienamada hija, tengo un mensaje, que debo impartir al pueblo estadounidense.

Mis muy queridos bienamados seguidores, deben prestar atención a Mi Santa Palabra ahora y escuchar:

Ustedes están enfrentando mucha persecución a causa de los pecados de sus compatriotas y de los que están controlando sus leyes del aborto. Este pecado tan grande, del cual ustedes son culpables por encima de millones de veces, ha cortado Mi Corazón como si una espada lo hubiera perforado muchas veces.

Sus pecados de inmoralidad y su amor por la riqueza material me ofenden profundamente. Ustedes no me son fieles, de la manera en que se espera de ustedes. Aquellos de ustedes que han caído lejos de la Verdad, deben acudir a Mí para que Yo pueda abrir sus ojos.

Amo a todos los hijos de Dios en los Estados Unidos de América, pero temo que el pecado ha abierto una brecha tan grande que muchos de ustedes caerán en un abismo de desesperación, a menos que acepten la Existencia de Dios.

Es importante que oren mucho porque el poder de Satanás se ha infiltrado en muchas de sus leyes. Las leyes, de las cuales la mayoría han de ser introducidas por los ateos que hay entre ustedes, serán detestables a los Ojos de Mi Padre.

Cómo lloro por el engaño que les será presentado. Mis pobres siervos consagrados entre ustedes serán aplastados como insectos bajo los pies de aquellos líderes que me niegan a Mí, su Jesús.

Este es un tiempo en el que la oración debe ser su meta diaria, para que su nación pueda ser salvada e incluída entre mis doce naciones en el Nuevo Paraíso.

 

Aquí está la Cruzada de Oración (85) Por los Estados Unidos de América para salvarlos de la mano del engañador.

“Oh querido Jesús, cubre nuestra nación con Tu Más Preciada Protección. Perdona nuestros pecados en contra de los Mandamientos de Dios. Ayuda al pueblo estadounidense a volver a Dios. Abre sus mentes al Verdadero Sendero del Señor. Desbloquea sus corazones endurecidos, a fin de que den la bienvenida a Tu Mano de Misericordia. Ayuda a esta nación a levantarse contra las blasfemias, las cuales puedan ser infligidas a nosotros para obligarnos a negar Tu Presencia. Te rogamos, Jesús, que nos salves, protégenos de todo mal y acoge a nuestro pueblo en Tu Sagrado Corazón. Amén.”

 

Vayan, pueblo Mío, y nunca tengan miedo demostrar su amor por Mí; o negarían su Cristianismo.

Su Jesús