16 jun 2012 Los cielos serán retirados, como un techo que se abre
Sábado 16 de junio de 2012 a las 19:40 hrs.
Mi muy querida bienamada hija, Mi Palabra está siendo oída por millones a lo largo del mundo, mientras preparo a todos los hijos de Dios para Mi Divina Misericordia.
Hay aquellos bendecidos por el Espíritu Santo que sabrán instantáneamente, al leer Mis Mensajes, que ellos vienen de Mis Divinos Labios.
Aquellos que dicen que me conocen, pero que fallan en reconocerme, aún así no pueden resistir leer Mi Palabra, aunque luchan contra Mí.
Ellos me rechazan, sin embargo todavía son atraídos a Mis Mensajes.
¿No se dan cuenta de que es el Espíritu Santo, que aunque latente en sus almas, todavía los atrae hacia Mí?
Yo digo esto a ellos: El tiempo ha llegado para que dentro de poco tiempo sus agravios les serán mostrados durante El Aviso.
Su odio a Mi Palabra les será revelado a ustedes y en ese momento conocerán la Verdad.
Cuando eso suceda, deben entonces unirse a sus hermanos y hermanas y luchar por el derecho a defender a Mi Iglesia en la Tierra.
Los cielos serán retirados como un techo que se abre, para revelar los Fuegos y las Llamas de Mi Divina Misericordia.
La Tierra será sacudida con tal fuerza que ningún hombre escapará a Mis Ojos, a Mi Espíritu o a Mi Don.
Muchos temblarán de miedo, porque será solo entonces que muchos tomarán consciencia de sus almas por la primerísima vez.
Ellos conocerán que el amor a sus cuerpos y a todos los sentidos que buscan fomentar, no tienen sentido.
Ellos verán cada parte de su alma, pero no será a través de sus propios ojos con los que la verán. Ellos mirarán sus almas a través de Mis Ojos.
Se sentirán enfermos y nauseabundos, como lo hago Yo, cuando veo la fealdad de sus miserables malas acciones.
Verán cuán corrupto fue su comportamiento hacia otros y el mal que hicieron a sus semejantes, sus hermanos y hermanas.
Luego verán su amor a ellos mismos, la vanidad y el amor a falsos ídolos y sabrán cómo esto me ofende.
Porque aquellos cuyos pecados son tan negros, se sentirán enfermos, con dolor y no serán capaces de soportar el horror que tienen que ver. Necesitarán toda fuerza, para resistir la purificación necesaria, que les permita sobrevivir y seguir el camino de la Verdad.
Es importante comprender que El Aviso es solo eso. Yo vengo a advertir a los hijos de Dios que sus pecados pueden ser y serán perdonados.
Vengo a mostrarles cómo será el Día del Juicio. Esto significará que aquellos que pidan redención en esta etapa serán salvados.
A aquellos que todavía me rechacen, les será dado tiempo para arrepentirse, pero no mucho. Si ellos todavía renuncian a Mi Mano de Misericordia, entonces Yo tendré que retirarme.
Luego Yo dividiré a los justos hacia un lado y a los injustos hacia otro. Una oportunidad más para buscar redención y aquellos que rehúsen Mi Mano de Amor y Misericordia, serán arrojados al Infierno.
Esta profecía ha sido predicha desde el principio.
Presten atención al Aviso y salven sus almas mientras puedan.
Su Jesús.