01 mar 2012 Uníos mientras entramos por las puertas del Nuevo Paraíso

21.08.2013 00:07

Jueves, 1° de marzo de 2012 a las 19:55 hrs.

Mi muy querida bienamada  hija, muchos de Mis hijos serán ahora salvados por las oraciones y el sufrimiento de Mis queridos seguidores, cuyo amor por Mí excede a aquel que conoce la mayor parte de la Humanidad.

En este período de intensidad, sostengo y confío en Mis seguidores para ayudarme a salvar almas.

Muchas de estas almas no sobrevivirán el acto de Mi Divina Misericordia y morirán en pecado mortal.

Muchísimos de vosotros habéis respondido a Mi llamada con tal obediencia y generosidad de corazón.

Me traéis un gran consuelo.

Os bendigo Mis queridos seguidores, y os pido que continuéis orando por las almas de los demás.

A toda la Humanidad se le dará pronto el don de Mi Misericordia.

Ninguno dejará de llegar a comprender la verdad de Mi existencia. Pero no todos querrán acogerme incluso cuando la verdad les sea revelada.

Esas son las almas que Yo anhelo.

Esas son las almas perdidas por las cuales Mi amada Madre derrama lágrimas.

Esos son los pecadores que debéis ayudarme a salvar porque Yo quiero salvar a todos los hijos de Dios.

Rezad y uniros para ayudarme a atraer y reunir a todas y cada una de las almas mientras entramos por las puertas del Nuevo Paraíso.

 

Cruzada de Oración (35): Oración para que las almas entren al Paraíso:

Oh Jesús mío, ayúdame a ayudarte a salvar al remanente de Tus hijos en la Tierra.

Pido que, a través de Tu Misericordia, rescates almas del espíritu de la oscuridad.

Acepta mis pruebas, sufrimientos y penas en esta vida, para salvar almas del fuego del Infierno.

Lléname con las Gracias para ofrecerte estos sufrimientos con amor y alegría en mi corazón, para que así todos nosotros nos unamos como uno solo en amor por la Santísima Trinidad y vivamos Contigo, como una sola Santa Familia en el Paraíso. Amén

Hijos, vosotros sabéis cuánto os amo.

Vosotros que me conocéis, entenderéis lo profundo de Mi dolor y sufrimiento debido al número de personas que rechazan Mi mano de misericordia.

Sólo vosotros, a través de vuestras oraciones, podéis ayudar a estas almas y así traerme el consuelo que Yo deseo.

Manteneros ahora cerca de Mí.

No pasará mucho tiempo.

Sed pacientes y rezar.

Relajaros, sentir Mi amor.

Todo estará bien.

 

Vuestro Bienamado Jesucristo.